Novak Djokovic derrotó a Andy Murray y enfrentará a Rafael Nadal en la final del Abierto de Australia

En un partido maratónico de cuatro horas y cincuenta minutos, Novak Djokovic derrotó al escocés Andy Murray por 6-3, 3-6, 6-7, 6-1 y 7-5, y se clasificó a la final del Abierto de Australia, donde enfrentará al español Rafael Nadal. Será la tercera final del serbio en Melbourne.

El Abierto de Australia vibró al ritmo de una semifinal tan vibrante como agotadora. El serbio Novak Djokovic y el escocés Andy Murray se mataron a tenis durante cuatro horas y
cincuenta minutos en la pista central del Melbourne Park, en la segunda semi del primer Grand Slam del año. Y entre tanta destreza y esfuerzo físico, quien sacó una luz de ventaja fue el actual número uno del mundo, Djokovic, que se quedó con la victoria por 6-3, 3-6, 6-7, 6-1 y 7-5 ante el número cuatro del ranking mundial.

En un encuentro sumamente parejo (fue la reedición de la final del año pasado), donde abundaron los errores no forzados desde ambos lados debido al agotamiento y los break points fueron moneda corriente, la solidez de Nole fue demasiado para un Murray que, pese a todo, dio pelea hasta el final y pudo haber cambiado la historia.

Pese a la paridad, daba la sensación de ser el británico quien se encotraba en mejores condiciones, más aún luego del eterno tercer set que Murray pudo sacar adelante y de las continuas muestras de cansancio por parte de Dkokovic. Sin embargo, en la cuarta manga, el actual campeón de Australia despertó y sacó a relucir su mejor tenis -y su mejor saque- para llevarse el set con facilidad y encaminar su victoria en el quinto, gracias a dos quiebres del servicio de su rival. “Es evidente que fue un partido muy duro... Fue uno de mis mejores partidos. Fue igual de duro emocional y mentalmente'', aseguró.

Con este triunfo, Novak accedió a la final del torneo que se jugará el domingo (será su tercera tras sus consagraciones en 2008 y 2011) en la cual se medirá con el español Rafael Nadal, número 2 del mundo. Ambos tenistas se enfrentarán por trigésima oportunidad con un balance favorable al español de 16 triunfos y 13 derrotas, si bien el año pasado el serbio ganó en las seis ocasiones que se vieron las caras, todas ellas en finales y en las tres superficies posibles. “Qué puede ser un desafío mayor que enfrentarse a Rafa Nadal, uno de los más grandes de todos los tiempos. Tengo un gran respeto por él y somos amigos fuera de la cancha”, concluyó el mejor tenista de la actualidad.