El checo Tomas Berdych, sexto sembrado, dio la gran sorpresa del Abierto de tenis de Estados Unidos al eliminar este miércoles al suizo Roger Federer, número uno mundial, con parciales de 7-6 (7/1), 6-4, 3-6, 6-3, y clasificarse a semifinales del último Grand Slam del año.
Berdych consiguió su primer pasaje a la ronda de los cuatro mejores y ahora buscará ingresar a la final enfrentando al escocés Andy Murray (N.3), que a primera hora superó al croata Marin
Cilic (N.12) por 3-6, 7-6 (7/4), 6-2, 6-0.
Con un juego agresivo y sin miedo a arriesgar, el joven checo de 26 años le arruinó a Federer su sueño de convertirse en el primer hombre en 87 años en ganar un sexto título del US Open.
Federer, campeón de 17 torneos del Grand Slam y quien buscaba su 33ª semifinal de torneos "majors", se vio superado por un rival que le colocó 14 aces, trabajó mejor con su primer servicio (80%), tuvo una elevada devolución de 71% y le cobró 5 de 11 quiebres posibles.
"No pude haber jugado mejor. No recuerdo otro momento de mi carrera en que jugara tan bien", declaró el checo al pie de la cancha.
Esta fue la peor derrota de Federer desde que perdió con el argentino David Nalbandián en la cuarta ronda del US Open 2003.
"Simplemente no estuve a gran altura esta noche. Es lamentable", expresó Federer sobre su derrota.
Berdych tenía récord perdedor de 4-11 frente a la estrella suiza, y su último triunfo se remontaba a los cuartos de final del Máster 1.000 de Cincinnati.
"Aprendí mucho de los anteriores partidos y traté de aplicarlo ahora", apuntó Berdych.
EL PARTIDO:
Al parecer, a Federer le sacó de paso el descanso que tuvo el lunes debido a la no presentación del estadounidense Mardy Fish por baja médica, y comenzó este partido fuera de ritmo y poco ajustado en el saque.
Berdych no le perdonó y le cayó encima desde el primer raquetazo con un juego muy ofensivo, saques supersónicos de hasta 220 km/h, y unos reflejos excelentes para restar el peligroso servicio de Federer.
El checo quebró a su más encumbrado rival en la primera manga con tiros incómodos a las esquinas, que en más de una ocasión dejaron parado a Federer, y ahí marcó la diferencia más tarde en el desempate de ese set.
Federer sólo pudo hacer un punto en el 'tiebreak', y fue por uno de los 7 errores no forzados que cometió Berdych en ese primer tramo.
Mientras Federer sufría en la húmeda noche neoyorquina, los 27.959 habitantes de Valasske Mezirici, el pueblo natal de Berdych, debieron haber lanzado los sombreros al aire cuando el joven checo quebró al multicampeón por segunda ocasión en la noche, al principio del segundo set.
Y la cerveza Pilsen debió correr a mares cuando unos minutos después repetía la hazaña, defendía bien su saque y se llevaba el segundo set 6-4.
Por minutos, el estadio enmudecía cuando el chico pueblerino rompía de nuevo el saque y se iba delante 3-1.
Fue entonces cuando el suizo tuvo una tremenda reacción y las cosas comenzaron a torcérsele a Berdych, cuando Federer hiló ocho puntos seguidos, quebró dos veces y le dio vuelta al tope al ganar el tercer parcial 6-3.
Empero, el checo no se amilanó y mantuvo la pulseada en todo el cuarto set, hasta que en el octavo 'game' encontró la brecha y quebró de nuevo a su temible rival para adelantarse 5-3.
En el último segmento, le sacó provecho al segundo de los tres puntos de partido que se le presentaron, cuando Federer metió el saque checo contra red para su 40 error no forzado de la noche, cifra inusual en el número uno mundial.
Frente a Murray, Berdych tiene récord ganador de 4-2, con una victoria por bando este año.
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